Cuando Silvia Pinal tomó la decisión de realizar un libro autobiográfico estaba consciente de que antepondría la verdad sin importar si algo de lo escrito no era del gusto de alguien más, aunque fueran sus propias hijas.
Por eso, ahora que el libro Esta soy Yo ha desvelado algunas anécdotas familiares muy personales, la actriz asegura que no necesitó el permiso de sus hijas y aunque confía en que su familia entenderá la razón por la que decidió contarlas, no le importa si no lo hacen.
“Mis hijas no me dan las gracias de nada, y si se enojan ¡ni modo! No importa. Es mi vida y la hago sin herir a nadie. No necesito que me apoyen, tengo la confianza en lo que he hecho para poderlo contar sin ningún problema, pensando que lo van a entender.
“Si no lo hacen, espero que me perdonen, pero es como se deben hacer unas memorias”, dijo Pinal durante la presentación de su libro el marco de la 37 edición de la Feria del libro en El Palacio de Minería.
En declaraciones reproducidas por el periódico Excelsior, la madre de Alejandra Guzmán y Sylvia Pasquel aseguró que trató de ser lo más honesta posible a la hora de contar sus experiencias de vida y aunque decidió contar algunos de sus peores momentos, como cuando vivió violencia familiar al lado de Enrique Guzmán, algunos temas no quiso exponerlos.
“Tampoco puedo decir las cosas tan feas que me han hecho. Hay situaciones que son muy desagradables o fuertes que no viene ni al caso plasmar, afortunadamente son pocas las que me han pasado”, aseguró.
Respecto a su estado físico, la primera actriz afirmó tener buena salud y desmintió nuevamente estar enferma .
“Mi salud está como ‘Popeye’, me siento muy bien, estoy muy bien, como muy bien, duermo mucho. Si alguien ha dicho que estaba enferma, miente, he estado bien, estoy bien y espero seguir estando bien”.
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