Selena Gomez decidió apostar por causar impacto con una nueva imagen rubia, de cara a su participación en la gala de los American Music Awards.
Aunque el resultado final ha valido la pena, el proceso para conseguir que la cantante pasara de morena a rubia platino duró nueve horas y mantuvo ocupadas a dos estilistas durante toda una jornada hasta casi acabar con sus existencias de tinte.
“Nos llevó nueve horas, 300 hojas de papel de aluminio y ocho frascos de decolorante, todo ello con dos personas trabajando simultáneamente. Fue un proceso largo y tedioso”, añadió el otro de los estilistas.
Categorías:Espectáculos