El título tenía algunos seguidores fijos de Kris Kristofferson,  por temor a su álbum del año  2013 “Feeling Mortal”,que había sido el último.

El nuevo disco está grabado en vivo, cuenta con 25 de sus canciones más conocidas en una colección que celebra la marca perdurable del legendario cantante y compositor de la música americana en el último medio siglo.

Lanzado cinco días antes de su 80 cumpleaños, es un desfile  de la mejor  música country sin adornos. Un disco  honesto y un buen recordatorio de sus contribuciones a un género ya veces confundido con el pop sobreexcitada.

HPor supuesto, entre las canciones está  “Me and Bobby McGee”, “Sunday Mornin ‘Comin’ Down”. Y con la ayuda de su buena amiga Sheryl Crow, ahí está su primera grabación de The Loving Gift,” un tema de  Kristofferson, que la hicieron famosa  Johnny Cash and June Carter Cash.

La voz de barítono de Kris de alguna manera es aun más profunda y áspera que en su mejor momento, pero también menos desafiante. Melancólica, también, en ocasiones.

El disco fue grabado durante tres días en Cedar Creek Studios en Austin, Texas, y suena el nativo de Brownsville ,como en casa. Kris cuenta con recibe ayuda en la guitarra de Shawn Camp, Kevin Smith en el bajo, Michael Ramos,  en los teclados y Mike Meadows ,en la batería.