• Estas reglas son un modelo exclusivo para la protección de los derechos humanos en los Centros Penitenciarios del Estado

Con el propósito de consolidar un sistema penitenciario sólido y respetuoso de los derechos humanos de las Personas Privadas de la Libertad (PPL), personal de las áreas técnicas del penal de La Paz, fueron evaluados por la Embajada de los Estados Unidos y el Instituto Nacional de Ciencias Penales (INACIPE), con el fin de obtener la certificación para la aplicación de las “Reglas Nelson Mandela”, dio a conocer el director general del Sistema Penitenciario en el Estado, José Francisco Jiménez Gómez.

El titular de estos centros en la Entidad, expresó que, al concretar satisfactoriamente esta evaluación, el centro podrá contar con este reglamento, el cual, aseguró, es un modelo actualizado para la administración de los centros penitenciarios en el que predomina el respeto de los derechos humanos, el trato igualitario y la constante revisión al interior de los penales, a fin de constatar las condiciones en las que viven los PPL.

“Esta nuevo modalidad consta de un mecanismo de supervisión e inspección el cual incluye revisiones periódicas, una realizada de manera interna por el área administrativa y la segunda es llevada a cabo por un organismo independiente competente en la materia, lo cual nos ayudará a mejorar nuestras estrategias de trabajo y aportar una perspectiva nueva, permitiéndonos adoptar medidas para evitar el riesgo de abuso al interior de los penales, favoreciendo un entorno seguro y humano” destacó.

Dicha evaluación fue aplicada a los encargados de las áreas de criminología, médica, psicológica, trabajo social, educativa, laboral, coordinación administrativa y departamento jurídico, quienes a su vez serán replicadores del cumplimiento de estas reglas dentro de los procesos propios de este penal a favor de las personas internas.

Finalmente, José Francisco Jiménez Gómez puntualizó que estas acciones vendrán a reforzar la operatividad interna del centro y esto logrará que los privados de la libertad vivan en un entorno seguro y en pleno respeto de sus garantías individuales.